La cultura del Argar

La prehistoria es una mierda. No es algo que os deba sorprender si me habéis leído de vez en cuando. Más que nada porque es una opinión que no me molesto en disimular.

Seamos sinceros, a vosotros tampoco os interesan los pobladores de la Península Ibérica alrededor del tercer y segundo milenio antes de Cristo. No os juzgo en absoluto, os comprendo a niveles que no os imaginaríais. Quiero decir, para mi hay cosas mucho más interesantes (hablando siempre de Historia, ojo) que un montón de poblachos en la zona de Andalucía oriental y el Levante.

Y por si había alguna duda: sí, estoy hablando de la Murcia prehistórica. MÁS prehistórica.

Me acuerdo de las clases de prehistoria en la facultad. Me acuerdo muchísimo de cómo los profesores disfrutaban como gorrinos en un lodazal con estos campechanos prehistóricos. De lo guays que fueron estos zagalicos hasta que, después de mil años o así, desaparecieron bruscamente.

Para hablar de los yacimientos arqueológicos murcianos deberíamos hablar de... MURCIA SOTERRADA.

Porque os voy a contar una cosa: la gente de la cultura del Argar dejaba su basura por todos sitios. Ahora se llaman “restos arqueológicos” porque son antiguos, pero en el momento era basura por todos sitios. Que si cimientos de casas en tal sitio, que si enterramientos en campos de urnas en cual sitio. Ríete tú de los plásticos en el mar: estos tíos eran mucho peores, solo que con cerámicas que no importaban a nadie.

Todas las culturas tienen algo característico: los griegos tienen el Partenón, los egipcios las Pirámides, y la cultura del Argar tiene lo enterramientos en urna. Cuando se encontraban un cadáver, sentían la imperiosa necesidad de meterlo (junto a sus cosas preferidas en vida) en un cántaro gordo, cerrarlo bien y enterrarlo hondo. No me preguntéis, supongo que son cosas de murcianos, pero si algún murciano me lee, que me confirme (por favor) si se sigue utilizando el enterramiento en tinajas en mitad de un campo.

En Idealista se oferta como "estudio coqueto para soltero o estudiante".

Como he dicho, los individuos tenían un ajuar funerario bastante vistoso. No había nada mejor que enterrarse con puñales y espadas (si eras un hombre) o puñales y diademas (si eras una mujer). Luego ríete con que las chicas tienen juguetes sexistas por navidad, cuando la cultura ya lo tenía claro: el hombre a matar, y la mujer a ser guapa y a matar.

También había joyas (como pulseras y brazaletes de metales preciosos), y las armas a veces eran espadas, otras veces eran hachas o alabardas. Pero estos enterramientos con ajuares funerarios ponen de manifiesto una cosa: que en la cultura del Argar había estratos sociales diferenciados, y unos tenían más poder que otros. Y puede que viole algunas mentes, pero a lo mejor en vez de Prehistoria deberíamos hablar de Protohistoria.

Finisima diadema de tipología Argar B.

Lo cual quiere decir, Dios no lo quiera, que el primer estado articulado como tal en la Península Ibérica, podría ser de origen marciano murciano. Porque además los poblados de la cultura del Argar eran poblados amurallados, situados en zonas de difícil acceso. Aunque eran bastante humildes, estaban construidos en duradera piedra. Es posible que a estas gentes les gustara mucho lo de pegarse entre ellos, o de robarse el ganado.

Porque resulta que parece que tenían predilección por la labor agropecuaria. Así que probablemente alguna incursión a los corrales del poblacho vecino, espada en mano, ocurriría. Algún artesano de la alfarería o de la metalurgia habría también por ahí, porque alguien tenía que hacer las vasijas para enterrar a la gente y las diademas para que tuvieran calaveras mondas y bonitas. Pero lo importante es que estaban tan avanzados que no había cazadores.

Pero, a ver, es la Prehistoria, así que no interesa a nadie.