Vorágine social

No, damas y caballeros, no me estoy refiriendo a las manifestaciones ni protestas contra las diversas medidas que pone en practica el gobierno, me estoy refiriendo a la vorágine de vida social que he tenido la ultima semana.

Míralos, todos ahí en la playa, confabulando y poniéndose de acuerdo todos para hacerme mover de casa.

Hay momentos en la vida (o verano) en la que la conjunción de las estrellas es especial, los planetas se alinean de una forma que mi teléfono no deja de sonar. Incluso hasta intentan contactar conmigo por el móvil.

Haces planes con alguien y, de repente, te llaman dos o tres personas mas que quieren quedar contigo el mismo día a la misma hora. Son esos días los que creo que Dios me odia. Y no es un odio de "voy a putear a este un poquito, jijijijiji", no, es un odio visceral, cargado de rencor como una rencilla personal de pueblo.

Seguiré las enseñanzas de Moe: "Invítalo a cenar y cuando menos se lo espere: zas, tenedor en el ojo"

Pongámoslo de forma científica:

Tenemos las personas A, B y C. Ese trío de seres humanos quiere quedar el mismo día, a la misma hora y en diferentes lugares ¿con quién quedas en función de la siguiente información?

La persona A hace mucho que no la ves, deberías quedar con ella pero sabes que puedes aguantar sin quedar con ella, aunque te esté dando mucho mal con querer quedar contigo.

La persona B la ves a menudo, te gusta quedar con ella porque te sientes muy a gusto, pero te quita mucho tiempo que podrías estar dedicando a otras amistades y ya la has visto bastante a menudo.

La persona C es un poco cargante, pero como amigo suyo tienes que quedar con ella. Es como una especie de trabajo social: tienes que soportarla X veces al mes, como persona honorable que eres.

Quedar conmigo termina siendo una quiniela versión jarcor

Solución: quedes con quien quedes, solo puede ser uno y los otros dos fruncirán el ceño en señal de desaprobación. Felicidades, has perdido.

Al final del día, llegas a tu casa esperando descansar y pasar pagina, pero por caprichos del destino, al día siguiente volverá a ocurrir lo mismo con las personas D, E y F. Luego están los amigos que al oir spoilers de Juego de Tronos te pegan patadas en la pierna, dejándote tullido durante una semana y con una moradura negra del tamaño de un pomelo en tu muslo derecho. Esos no deberían ni optar a quedar conmigo, por mucho que se arrastraran, hasta que no me recompensaran con generosidad por su agresión física desmedida.

Soy un chico ocupado, soy un chico popular como una mezcla entre la capitana de los animadores y el quarterback del equipo de rugby.

Yo no se quien es ella, pero sí se que está pensando en invitarme al baile de fin de curso porque soy el más popular