A lo mejor soy yo, que estoy escribiendo esto una noche
electoral y estoy teniendo un deja-vu de hace un par de semanas, pero estoy
casi seguro que ha pasado ya un tiempo que dije un par de verdades como puños
sobre Barcelona. Y, visto que la afluencia de turistas no ha caído a mínimos
históricos, puedo proseguir con mi cruzada personal para hundir la tasa de
turismo de mi país.
Hoy voy a hablar de la capital de las Españas, la Villa y
Corte, la ciudad de la boina negra perpetua... niños, pedid a vuestros
progenitores que no visiten ese pozo de maldad que es Madrid.
Al contrario que otras ciudades de mayor confianza y gusto
estético, Madrid no tiene constancia de asentamiento humano estable hasta la
invasión islámica. Si nos ponemos puntillosos hay constancia de restos de
actividad humana, pero encontrar unas piedras de sílex en el término municipal no
son base para decir que Madrid tuvo poblamiento prehistórico.
Madrid en hora punta durante la Antigüedad.
Tampoco me valen unas cuantas tumbas visigodas, que el
Madrid actual tiene una superficie de más de seiscientos kilómetros cuadrados,
y los poblamientos de la Antigüedad apenas son cuatro chamizos con una calle
que los atraviesa. Y en seiscientos kilómetros cuadrados, al menos por
estadística, alguna de esa fusión de chamizos tendría que haber.
Así que si te ofende tremendamente eso de que Madrid no
tuviera poblamiento hasta la Alta Edad Media, siempre puedes consolarte
creyendo que Madrid se inició como una fusión de chamizos oscura y blasfema en
la Prehistoria. Pero vamos, que el problema está en tu cabeza y deberías ir al
psicólogo a tratar tu gusto por la Historia Antigua. O, si has perdido toda la
esperanza, al lobotomizador de confianza de tu barrio.
Tenemos que llegar al siglo IX, ya bajo dominio musulmán,
para encontrarnos referencias a Magerit, una pequeña fortaleza y su
correspondiente poblacho. La misión del enclave sería la de ser un punto defensivo
desde el que proteger la sierra de Guadarrama y un asentamiento de referencia
desde el que lanzar incursiones hacia los reinos cristianos. Poca relevancia
para la ciudad, que dependía de la taifa de Toledo, que era un poblamiento
MUCHÍSIMO más importante.
No sabéis lo difícil que es buscar "Madrid + [adjetivo negativo]" cuando no quieres fútbol.
Hasta este momento, Madrid era tan insignificante que apenas
se han conservado restos arqueológicos. Tenemos que esperar a la conquista
cristiana, pasado el año 1000, para que comience la debacle urbanística.
Empiezan a crearse los arrabales y juderías que, como todos los guetos y
aglomeraciones de gente, tienen un trazado que hace que me recorran sudores fríos
por la espalda.
Los reyes cristianos fomentan el crecimiento del poblacho de
Magerit a base de cartas puebla, o lo que es lo mismo, dar privilegios a las
personas que dedican establecer allí su hogar. Lo cual quería decir que nadie
quería vivir en la zona y que los reyes tenían que sobornar a la gente para que
la zona resultara medianamente tolerable. Y este análisis es totalmente parcial
e injusto, pero me da igual. ¿Acaso tienes tú un título de historiador? Yo lo
tengo, por alguna parte.
La relación de la ciudad con la monarquía es clara: a los
reyes les molaba Madrid porque había mucha caza, y la caza era el principal
entretenimiento para la gente que no tenía que trabajar. Y esa relación entre
la ciudad y el monarca fue la razón por la que Felipe II la eleva a capital del
reino. Porque ¿para qué establecerla en otra ciudad si luego vas a estar todo
el tiempo viajando a los cotos de caza de Madrid? Sería más o menos como elegir
tu habitación en función de lo fuerte que llega el wifi.
Osos y reyes cazadores ¿qué podría salir mal?
Después de establecerse la corte en Madrid, la ciudad se
masifica. No es solamente que lleguen un montón de los típicos pelotas que
tienen todos los reyes (que llegan a camionadas), también hay que tener en
cuenta a los miembros del servicio de esos nobles, los burócratas, los
artesanos de cosas caras y gente en general que quiere los dineros de los
adinerados. No os voy a enumerar los edificios que se levantan porque no quiero
aburriros, pero se edifican muchos.
El siguiente hito ya es durante los Borbones, con Carlos
III, que pone un poco de orden en el enorme caos que era Madrid (descrito como una
ciudad oscura, sucia, masificada y pestilente). Se crean avenidas grandes para
combatir las calles oscuras y angostas, se planifican parques y fuentes
públicas para hacerla menos sucia, se edifican hospitales para atender a la
gente y se implanta un sistema de alcantarillado. Por la razón que sea hasta entonces
a todo el mundo le había parecido que algo que ya usaban los romanos era
opcional.
El casco histórico de Madrid hecho fursona.
Pero tras la muerte de Carlos III vuelve la barbarie. Barrios
creciendo sin control, arrabales de proletarios desposeídos, miseria… la
industrialización. Oh, Dios santo, la industrialización y su inherente
contaminación. La buena noticia es que la Guerra Civil derribó un gran
porcentaje de la ciudad y el franquismo pudo levantarla otra vez.
La mala noticia es que el franquismo tampoco tenía buenas
ideas y no hizo más que empeorar la ciudad. Una lástima.
Mierda de siglo XX.
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