He acabado los exámenes y (por ahora) las
notas que me han dado han ido bien, aunque me esperaba un poco más en alguna ocasión,
no ha habido problemas para aprobar por ahora.
En otro orden de cosas: Obviamente el titulo de esta entrada
es una exageración pero quedaba bien y quién no haya exagerado alguna vez en su
vida que levante la mano.
Si hacemos caso a la historiografía tradicional, los godos
que suplantaron al decadente Imperio Romano de Occidente se dieron un paseo por
la Península Ibérica para fundar una cosa nueva llamada España. Esta España,
que por supuesto no había sido fundada por tartesos (haciendo llorar de rabia e
impotencia a Schulten), fue brutalmente invadida por los islamistas en 711 que
destruyeron nuestra Unidad de Destino en lo Universal hasta que Don Pelayo
rescato esa tradición de fundar España. Si hacemos caso a la historiografía
tradicional, los godos fueron la primera monarquía española.
Chindasvinto, Recesvinto y Égica, no te puedes enfadar con ellos porque se les ve en la cara que son buenas personas
Una monarquía electiva en la que en vez de votar con
papeletas se solía hacer con espadas y en vez de urna estaba el cuerpo del
contrincante electoral. De esta forma podemos deducir que los godos les gustaba
dejar clara su decisión electoral metiendo varios palmos de acero en la caja
torácica (independientemente por delante o por detrás) del contrincante.
Ese detalle hizo que la lista de los reyes godos sea
tan extensa. Treinta y tres desgraciados
en apenas trescientos años nos da una media de vida de nueve años más o menos
por cada monarca. Aunque había reyes como Chindasvisto que murieron por causas
naturales propias de la vejez, tenemos otros como Sigerico que solo duró una
semana en el trono para contrarrestar.
Sigerico, parece que la idea de descansar el fin de semana se la tomo
de forma demasiado drástica. "Reynó algunos dias", tócate los cojones.
Pero a lo que íbamos. Estos reyes que fueron pregonados como
fundadores de España eran de religión arriana. No sé que pensarán los Reyes
Católicos, pero sería divertido ponerlos a todo en el plató de Sálvame que
seguro que a más de un espectador se le regeneraban las neuronas y en el mejor
de los casos se aliaban para matar al engendro demoníaco de la Esteban.
Apréndetelos, no sirve para nada pero si los dices muy deprisa suena como si estuvieras cabreado.
Resulta irónico que uno de los países más
católicos, un país que siempre ha sido más papista que el Papa, fuera fundado
por católicos herejes. Pese a los testimonios magnificados de los primeros
cristianos (los Innumerables mártires de Zaragoza, no fueron tan innumerables porque se pudieron numerar: fueron 18). En
la Hispania romana el cristianismo convivió con el culto imperial y los dioses
clásicos romanos hasta bien entrado el siglo III d.C.
Del 410 al 507 nos encontramos al Reino Visigodo de Tolosa
(obviamente arriano), que mantiene una dependencia de Roma hasta que a Odoacro le
da la turruntela y depone al pobre Rómulo Augústulo (genial ironía la de estos germánicos . Con el destronamiento del niño que llevaba el nombre del fundador y el
primer emperador romano, el Reino de Tolosa se
escinde del cadáver marchito y maltratado del Imperio Romano.
Posteriormente, los francos desplazaron a los visigodos y los expulsaron más
allá de los Pirineos, a Hispania.
Los visigodos, despechados y derrotados se concentraron en
conquistar los territorios bizantinos en lo que hoy por hoy es Murcia y el sur
de Andalucía. ¿Bizantinos? Si, bizantinos en la Península Ibérica, la llamada Provincia de Spania. Y como no eran
demasiados porque Bizancio tenía sus propios problemas de los que defenderse en
el este, no pudieron hacer frente a los godos.
Ni los Pirineos podían con el poder de los visigodos. Aunque los francos si, los francos les dieron cera.
También recibieron lo suyo los suevos, un pueblo bárbaro que
se había afincado en el norte peninsular y que por supuesto, discrepaba
territorialmente con el recién creado Reino de Toledo. San Isidoro de Sevilla nos
cuenta lo que hizo Leovigildo: «que afrontó los problemas con los suevos,
los pueblos del norte y los bizantinos, devolviendo la grandeza al reino
visigodo».
Y los bizantinos no eran turistas que venían en crucero por el Mediterráneo, precisamente.
A la muerte de Leovigildo le sucedió Recaredo. Recaredo no
fue tan guerrero como su predecesor y mostró una simpatía por el cristianismo
(que era minoritario pero importante entre los propios godos). Después de
celebrar en Toledo un sínodo con las principales autoridades religiosas
arrianas se decidió la conversión de rey y por lo tanto del cambio de la
religión oficial al catolicismo romano. Bye, bye arrianismo.
Siendo estudiante de Zaragoza y hablando del periodo visigodo, no puedo dejar de mencionar a San Braulio, buen cristiano y mejor persona.
Sin embargo el arrianismo siguió muy arraigado en el norte
peninsular y en la Septimania, como así puntualizan los alarmantes textos
recogidos en los sucesivos Concilios de Toledo.
Y así es como, mediante una entrada de blog anónima,
cuestiono los pilares religiosos de España. Otro día os contaré como la tumba
de Santiago Apóstol (eje fundamental de la religiosidad medieval en la Europa
occidental) es en realidad la presunta tumba de un obispo hereje muy querido en
el norte español llamado Prisciliano y cuyo culto perduró desde el s. IV hasta
casi el s. VIII.
No podía resistirme a hablar de godos sin poner un huscarle. Los que me entiendan me entenderán.
Unarticle mol interesante el origen de españa
ResponderEliminarUnarticle mol interesante el origen de españa
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