Jo, no se como empezar

Es verano. Verano en Zaragoza, lo cual es lo mas parecido a pasar un verano en una enorme sartén que he experimentado en mi vida. Ni ventiladores, ni aires acondicionados ni esclavos abanicándote mientras comes uvas en un triclinio pueden solventar de alguna forma ese calor.

 

Podría estar en estos momentos en la piscina de la imagen, disfrutando de la vista de jubilados haciendo aquagym

Después de que, contra todo pronostico y desafiando a las leyes de la probabilidad, haya aprobado todas las asignaturas y mi curriculum haya acariciado e higienizado los glúteos del mandamás de turno que haya sentido la llamada de la naturaleza, me he quedado en casa. Lo peor de todo es que mientras mis amigos han huido a la playa, a su pueblo o a destinos menos exoticos me quedo abandonado como un perrete en una gasolinera. Así que yo, solo, aburrido, pegado a un ordenador que podría hacerme unos huevos fritos o estallar espectacularmente (por el ruido y calor que desprende), inicio la andadura del blog.

No se muy bien lo que voy a hacer ni como lo voy a enfocar, es un pasatiempo respetable como otro cualquiera después de que mi tecla f5 se haya desgastado en facebook y tuenti. Por ahora pueden ir cogiendo sitio al fondo, junto a la salida de emergencia que he pintado en la pared de hormigón armado.