domingo, 26 de julio de 2015

Prora D'or, stadt de vacaciones



Hace dos semanas hablaba de una novela, luego alabé el estilo arquitectónico de una estación abandonada en mitad de los Pirineos y ahora voy a volver a hablar de arquitectura. Estamos culturales este verano.

El nazismo me parece un movimiento político muy interesante y...

Bueno, antes de que empecéis a llamar a Nuremberg, tengo que concretar un par de cosas:

1) El nazismo me parece un movimiento político muy interesante pero alejado de mis concepciones políticas

2) Personalmente, no me gusta pensar en los nazis como el antagonista malvado que la cultura popular nos ha dibujado, soy más de las tesis de Hannah Arendt de la “banalidad del mal”: los nazis no fueron monstruos sádicos, solo personas con una ideología política genocida y agresiva a los que se les dio carta blanca para hacer lo que quisieran.

Sin duda alguna, el alemán mas jodidamente hijo de puta de todos los tiempos fue el asesor de imagen de Hitler.

Para los que no sepáis de qué va el libro de Hannah Arendt “Eichmann en Jerusalén”: narra el proceso judicial por parte del estado de Israel contra Adolf Eichmann, uno de los responsables de la famosa “solución final” contra los judíos. Arendt afirma que Eichmann no era una persona de excepcional maldad, que solamente era un miembro patético del partido nazi que solamente estaba obedeciendo órdenes. A lo largo del juicio se demostró que Eichmann no era una persona demasiado inteligente, que necesitaba la aprobación de terceras personas para sentirse realizado y que a duras penas se había integrado en la vida laboral y social antes de su militancia en el partido nazi.

domingo, 19 de julio de 2015

Burgueses franceses, señoritos españoles y nazis en Canfranc



Hay lugares de España que son mágicos. Y si no creéis en la magia, por lo menos podéis admirar la poética decadencia de una de las mayores estaciones de ferrocarril del siglo XX español.

Estoy hablando de la Estación Internacional de Canfranc, ejemplo de la grandeza de tiempos pasados. La estación en sí es un edificio magnifico de características clasicistas y estética francesa. En la construcción se emplearon materiales modernos, como el cristal, el cemento o el hierro; que hoy no nos pueden impresionar porque estamos hartos de ver bloques de pisos hechos de esos materiales pero que en la época era toda una novedad para un pueblecito perdido de los Pirineos.

Actualmente es una de los edificios abandonados más bonitos de España ya que la estación cerró sus puertas tras un accidente ferroviario en el lado francés del túnel que conecta la estación con la red de ferrocarriles franceses. Personalmente pienso que es una lástima que uno de los edificios más emblemáticos de la estética de los “felices años 20” esté tan infravalorado por los gobiernos español y francés.

Si no te gusta la romántica decadencia de la estación de Canfranc no te preocupes, guardaré un minuto de silencio por la muerte de tu sentido de la estética

domingo, 12 de julio de 2015

Sin novedad en el frente [review literaria]



Ha llegado el veranito. Lo noto por esos abrasadores 50 grados al sol que ha habido en la calle en la que vivo. 

No sé por qué, pero en los sitios culturetas (véase Fnac y similares) empiezan a suponer que vas a tener mucho tiempo libre para leer libros. A montones. A destajo. Como si tu cerebro se mantuviera a una temperatura agradable y fresca mientras tu cuerpo se derrite. Empiezan a frotarse las manos mientras te recomiendan lecturas y lecturas estivales.

Lo cual me recuerda sospechosamente a cuando era pequeño y me mandaban cuadernillos de verano para joderme mis vacaciones. Así que yo, Lord Timothy Worsworth-Moriarty III, en un alarde generosidad, haré algo parecido: recomendar libros buenos. Ahora, una vez he acabado de escribir, me doy cuenta que he podido ser demasiado serio con el texto así que compensaré con las fotos.

El recluta Otto, porque en todos batallones tiene que haber un soldado "especial"